No conozco a nadie que no le guste el MINI, o por lo menos, que se quede indiferente ante su historia, apariencia o diseño. Si además has tenido la suerte de ponerte a sus mandos entenderás lo que significa una conducción divertida, deportiva, eso que dicen que es como llevar un kart; y eso ya se disfruta en cualquier versión de este icono Pop, Cool, moderno o como te apetezca definirlo. Desde luego, es algo que la marca siempre tendrá a su favor si lo comparamos con otros modelos de distintas casas.
Y ahora llega la nueva y más potente versión de este pequeño misil con ruedas: el MINI John Cooper Works, que estrena un aspecto más agresivo, con colores específicos como el Rebel Green que puede ir acompañado de un color de contraste en las carcasas de los retrovisores exteriores y el techo como el blanco, negro, o el también exclusivo para este modelo Chili Red, nuevo frontal más aerodinámico con un faldón con grandes tomas de aire, luces intermitentes laterales con una línea de color rojo y logo JCW sobre fondo negro, o las franjas para el capó, también únicas para este modelo.
Los nuevos frenos Brembo remarcan el look deportivo que ofrecen las también nuevas llantas de 17 pulgadas John Cooper Works Race Spoke, sin olvidar otros detalles como la doble trompeta de escape, el alerón trasero o los pasos de rueda de perfil negro.
Hasta aquí, todo bien, todo deportividad, ¿Y qué pasa dentro? ¿Tenemos que entrar con el traje de carreras? Pues no hace falta, si no quieres. Ahora el MINI JCW es un coche más práctico para el día a día: Monta unos nuevos baquets con apoyacabezas integrado que pueden venir rematados en cuero y Alcantara, son mucho más cómodos y ofrecen una gran sujeción lateral y lumbar, el espacio interior es mayor para los cuatro ocupantes (las dimensiones del coche han crecido) y el maletero llega hasta los 211 litros de capacidad.
El ambiente es de gran exclusividad, con materiales de mucha calidad y un equipamiento de serie muy completo que puede venir acompañado de las últimas innovaciones en materia de seguridad y asistencia a la conducción como la Pantalla virtual MINI HUD, el Park Distance Control, cámara de marcha atrás, sistema MINI Connected con Emergency Call y MINI TeleServices con tarjeta SIM, o selección de modos de conducción MID, Sport y Green con el MINI Driving Modes.
Con el modo Sport ya te imaginarás que no solo cambia el sonido del motor. Eso es solo el ansioso anticipo de lo que te puede dar este propulsor de gasolina de cuatro cilindros Turbo de 1.998 cc, de 231 CV (170 kW), que ofrece un par motor máximo de 320 Nm, y que es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,1 segundos con la caja de cambios Steptronic de seis velocidades (2 décimas más con el cambio manual de seis velocidades). Su velocidad máxima llega hasta los 246 km/h pero su consumo y su nivel de emisiones de CO2 son aproximadamente un 20 % menores, es decir, 5,7 l/100 km y 133 g/km.
Seguro que a estas alturas ya te apetece pasar a la acción. Pues bien, con un precio desde 31.750 euros para la versión con cambio manual, o desde 33.700 euros con cambio automático, podrás saber de primera mano de qué hablamos. (¿Lo conseguiría yo con una campaña de crowdfunding?...)
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