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Ferrari Roma Spider

Solo con verlo ya te engancha. El nuevo Ferrari Roma Spider rememora con diseño contemporáneo el estilo italiano de los años 50 y 60, reinterpretando el concepto de la "Nueva Dolce Vita".

Este V8 spider 2+ es extraordinariamente versátil, con un maletero de categoría superior, de 255 litros con la capota plegada, con trampilla a través de los respaldos de los asientos traseros que permite transportar objetos más grandes, conectividad inalámbrica de serie con Wi-Fi Android Auto y Apple CarPlay, y asientos ergonómicos calefactados y ajustables eléctricamente en 18 posiciones y neck warmer (calienta cuellos) disponibles bajo pedido para disfrutar de la conducción a todo confort.

Pero sobretodo es un Ferrari, y es descapotable, y se ha rediseñado el techo, bastante inclinado en la parte trasera, para integrar la luneta trasera en la estructura de la refinada capota de tela desmontable, que estéticamente mantiene la elegancia del Roma sin alterar su silueta, proporcionando un aislamiento acústico igual al de un techo duro retráctil.

La capota se repliega en 13,5 segundos hasta 60 km/h de marcha, y ocupa un reducido tamaño dejando más espacio al maletero, dividiéndose en dos secciones, convirtiéndose la sección inferior en un alerón activo de fibra de carbono que se conecta ópticamente con la luneta trasera, completando el diseño del techo, o a la geometría de los reposacabezas, según esté desplegada o recogida. El nuevo y patentado deflector de viento móvil está integrado en el respaldo de la banqueta trasera y se abre pulsando un botón en el túnel central favoreciendo el confort de los pasajeros y la aerodinámica, especialmente estudiada para la eliminación de turbulencias y para la eficacia en cualquier situación.

A ello contribuye el nuevo alerón activo de la parte trasera que puede adoptar tres posiciones: LD, MD o HD, dependiendo de la velocidad y de la carga aerodinámica solicitada.

Su línea es limpia, elegante y minimalista, sin respiraderos o decoraciones superfluas, con armonía entre el capó y los guardabarros, y un frontal que genera un efecto de nariz de tiburón. En él se muestra perfectamente integrada la reinterpretación de la parrilla del radiador, con dos faros lineales LED atravesados por una barra luminosa. Y detrás, el largo voladizo trasero, característico de los Ferrari de los años 50 y 60, se equilibra en un volumen trasero bajo y compacto, con unos grupos ópticos rediseñados de estilo minimalista.

En el interior, la visión de dos módulos envuelven a conductor y pasajero integrando a los pasajeros traseros, en una estructura casi simétrica. El cuadro de instrumentos es completamente digital y el pasajero puede disponer opcionalmente de una pantalla que comparte información de conducción. También hay una pantalla central de 8,4 pulgadas, mandos táctiles en el volante, con el trackpad a la derecha, y retroiluminación roja en el botón de arranque del V8 biturbo.

Este motor de 3.855 cm3 entrega 620 CV a 7.500 rpm con un par máximo de 720 Nm y una respuesta casi inmediata, integrando una caja de cambios de ocho velocidades utilizada en el SF90 Stradale que mejora en volumen y transmisión de par.

Para manejar todas las emociones que desarrollan su caballería, se integra el sistema SSC en versión 6.0 que controla la dinámica del Roma Spider, incluyendo el Ferrari Dynamic Enhancer (FDE) que complementa al Control Electrónico de Estabilidad y controlado desde el Manettino, con cinco posiciones.

Esta dinámica no se ve alterada con respecto al Ferrari Roma ya que solo aumenta su peso en 84 kg conservando unos valores de rigidez a la flexión y torsión de la carrocería y chasis excelentes.

Para tranquilidad de sus clientes, los estándares de calidad obtenidos son incomparables, incluyendo el programa Genuine Maintenance, con revisiones cada 20.000 km a una vez al año, y siete años de mantenimiento.